Solidaridad

Octubre toca a su fin, y como ya lo iba anunciando, el caos se recrudece por todo el planeta y con él, la libertad de expresión va desapareciendo como el vapor de nuestro aliento, en una fría mañana de invierno. 

Disturbios en Francia, disturbios en España, disturbios en Alemania y a medida que los días pasan, van observándose más episodios que no cesarán hasta que los interesados en mantener esta crisis impuesta, tengan listo el caldo de cultivo para imponernos el siguiente peso, acortando la libertad que aún tenemos y de la cual, pocos saben disfrutar. 

El invierno aún a Europa no ha llegado, este invierno se espera bien duro y largo, al igual, que la crisis que aún está emergiendo y pocos se imaginan.

El hombre lamentablemente no escarmienta, sigue en sus ansias de tener, en sus ansias por destruir, en sus ansias por comprar y almacenar para luego, tirar. 

Compras masivas producen basuras masivas, basuras masivas, producen un aumento considerable de la contaminación, está se traduce en enfermedades, y estas acarrean sufrimiento y muerte. 

Noviembre será una sorpresa y no para bien..., los encierros van a ser, el pan de cada día. Las multas, detenciones, robos y saqueos, serán la imagen de desesperación de todas esas familias, que ven, como mes a mes, su hambre se incrementa y los ahorros desaparecen. Lamentablemente, la solidaridad no es una forma de vida de la mayoría de esta sociedad, que aprovecha la desesperación y malestar de la gran mayoría, para robar y enfrentar a la clase media y baja, que debería estar junta y más en estos momentos en los que los pasos que demos, serán la llave para próximos acontecimientos. 

Ya entrando Diciembre, tendremos una versión más entretenida de lo que el 2021 nos espera. Sería conveniente detenerse a pensar, que puede cada uno hacer, para que la naturaleza se sienta cómoda y contenta. Lamentablemente, no es un ejercicio de agrado para muchos, pero si un deber para todos y la llave para terminar con esta sociedad y crear una nueva y más solidaria.