Vistas de página en total

martes, 24 de mayo de 2022

Sendero

Poco a poco va terminando Mayo y en las noticias empieza a visualizarse un nuevo problema sanitario, la Viruela del Mono, si bien en un principio no hay que alarmarse, algunos paises como Alemania, ya han comprado unas cuantas dosis inyectables y quien se infecte, se gana un encierro de 3 semanas, pero por no empezar a darle bombo a esta nueva cortina de Humo de esos que tanto nos quieren y haciendo la previsión de que seguramente con el fin de la "Guerra" entre Rusia y UcraniaOTANydemaspaises... se endureceran las condiciones de vida, debido al encarecimiento de la misma y debido también a la falta de alimentos y otros menesteres (como bien se ve en la portada de la Revista The Economist) "The coming Food catastrophe", donde sin mucha vergüenza, nos muestras unas plantas de trigo con unas calaveras humanas (en el lugar que ocupan las semillas) y viendo las "predicciones" que esta revista siempre nos deja, es preferible pecar de precavidos y empezar a armarse de paciencia y de lo que se nos ocurra. Seguramente más adelante me aventure a dar más datos, por de pronto y por salud propia, me decanté hace unos meses por aislarme de los medios de comunicación y alejarme de las noticias, optando por dedicar mi tiempo a otros menesteres más saludables y de alguna manera, siendo mi propio psicólogo, intentar salir de la crisis interna a la cual había llegado por diferentes circunstancias que llegaron a colapsarme internamente y a llevarme a un estado para nada agradable.

Hace unos días, tuve la oportunidad de disfrutar del mar, de los buenos alimentos, de la buena compañía, tuve la oportunidad de recordar momentos agradables, volví a engordar (toca eliminar esas grasas de más!) conocí nuevos lugares, nuevas personas y me reencontré con amigos que hace años no veía, pude recargarme de buena energía, probar algún plato que no conocía y por qué no, pude disfrutar de lo más valioso que hay, pude disfrutar del tiempo.

Lamentablemente no pude ver a toda la gente que hubiera gustado ver, quizás en otra ocasión pueda darse y si no, como más de una vez he escuchado, todo pasa por algo, hay gente que se va de nuestro camino, hay otra gente que se une por un tiempo, los hay que van y vienen y están los que por mucho tiempo que pase, siguen estando ahí, esperando a la oportunidad, para disfrutar juntos y seguir recorriendo el sendero, aunque solo sea para hacer una pausa y salir a pescar o simplemente para comer unos pintxos.

Como buen piscis, seguiré soñando despierto, seguiré cerrando los ojos, seguiré imaginando que pasara en unas semanas. El viaje continua.


No hay comentarios:

Publicar un comentario